Contar con una infraestructura de networking robusta es clave para el rendimiento y la seguridad de cualquier organización. Los router firewalls protegen la red frente a accesos no autorizados, mientras que los switches gestionan eficientemente el tráfico de datos entre dispositivos. Los puntos de acceso WiFi (AP) garantizan conectividad inalámbrica estable en toda la instalación, y la telefonía IP permite comunicaciones claras y flexibles a través de la red. Una solución integral que impulsa la productividad y la continuidad operativa.